La pirámide nutricional se basa en las necesidades nutricionales y energéticas. Las proteínas (carne, pescado, lácteos y huevos) se encuentran en la parte media de la pirámide, ya que aunque son esenciales, deben consumirse en cantidades moderadas.

Nuestro equipo de I+D es consciente de que todos los productos cárnicos que producimos pueden integrarse en una dieta equilibrada si se siguen las recomendaciones en cuanto a raciones y frecuencia de consumo.

La pirámide nutricional se basa en numerosos estudios científicos y muestra cómo debe ser nuestra alimentación para seguir una dieta equilibrada. Estas recomendaciones se dirigen a la población en general y pueden variar ligeramente durante la infancia y la edad adulta, o en el caso de consumidores con restricciones dietéticas especiales a causa de alguna enfermedad.