La pizza tiene origen italiano, pero ha arraigado en el mundo entero. De masa fina o gruesa, esponjosa o crocante, con bordes rellenos o doblada como una gran empanadilla, hay tantas variedades como gustos. Además, pocos alimentos invitan tanto a jugar con sus ingredientes: desde el clásico dúo de mozzarella y tomate hasta las combinaciones más arriesgadas o sorprendentes. Todo es cuestión de probar.
Si hubiera que elegir un solo punto en el mapa de Italia para determinar el origen de la pizza sería Nápoles. Allí nacieron las primeras pizzas. Hagamos un repaso por las variedades clásicas:
Esta pizza sencilla por excelencia lleva tomate, aceite, mozzarella y albahaca fresca. Se cree que fue creada por un maestro pizzero en honor a la reina Margarita Teresa de Saboya a finales del siglo XIX y que, para homenajearla, eligió ingredientes con los colores de la bandera de Italia. Fuera como fuese, esta pizza es un verdadero comodín que suele gustar a todo el mundo.
Es otra de las pizzas más simples y auténticas de Nápoles. Aunque su nombre haga suponer que incluye frutos de mar, sus ingredientes son muy básicos: tomate, ajo, orégano y aceite de oliva. Además, no lleva queso. Según se cree, era la receta habitual de los marineros porque, justamente, solo incluía ingredientes de fácil conservación.
Además de conquistar el paladar con sus sabores variados, esta pizza también entra por los ojos: cada cuarto representa una estación del año. Sobre una base de tomate, mozzarella y albahaca se van agrupando los ingredientes extra en cada uno de los cuartos: alcachofas para la primavera, setas para el otoño y jamón o aceitunas para el invierno. Para representar el verano se deja visible la base de tomate, albahaca y queso. Todo un festival de sabores.
El origen de esta pizza no está tan claro, aunque también se sitúa en el sur de Italia. Combina distintos tipos de queso, como el mozzarella, el gorgonzola —un queso azul hecho con leche de vaca— , el fontina o el parmesano. Pero también pueden incluirse otros, aunque no sean italianos, como cheddar o emmental.
¿Quieres probar una con cinco quesos? No te pierdas esta deliciosa pizza.
La masa napolitana es esponjosa y con bordes gruesos. Para conseguir esta textura, se hace girar la masa en el aire durante el proceso de amasado, antes de dejarla fermentar durante 48 horas. Después se cocina brevemente en horno de leña. Una curiosidad: la pizza napolitana elaborada de esta forma por los maestros pizzeros napolitanos ha sido reconocida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
El otro tipo de masa que compite con la napolitana es la romana, mucho más fina y crujiente. El amasado es más corto, pero se deja más tiempo en el horno para que pierda humedad y adquiera ese punto crocante.
Las variantes de pizza son innumerables. Estas son algunas de las más afamadas:
¿Una pizza con piña? Para muchos incluir este ingrediente dulce es casi un pecado. Sin embargo, la pizza hawiana tiene tantos detractores como defensores. Creada por un cocinero de origen griego en Canadá en los años 60, no tuvo mucho éxito en sus comienzos. Sin embargo, décadas después, la revista Time la incluía en la lista de las pizzas más influyentes de todos los tiempos.
Además del polémico ingrediente, la pizza hawaiana incluye queso (por lo general mozzarella) y jamón cocido en una base de salsa de tomate. Algunos le añaden también cebolla dulce.
Una solución elegante si hay diferencia de opiniones en la mesa: hazte con una pizza de jamón y queso y añade trozos de piña solo en la mitad. Así quedarán todos conformes.
Esta es una de las favoritas en Estados Unidos. De hecho, allí está su origen. El ingrediente protagonista es la salsa barbacoa —con su inconfundible color rojo oscuro y su punto dulce—, que sustituye o se combina con la de tomate tradicional. Otro ingrediente indispensable es la carne picada de cerdo, ternera o, incluso, pollo. Además, se añade queso y, de forma opcional, cebolla.
Si quieres probarla con un toque ligeramente picante, no te pierdas la pizza barbacoa de Campofrío.
Inspirada en la famosa pasta carbonara italiana, esta pizza incluye su sabrosa salsa, que en el caso de la pizza se prepara con nata, yema de huevo, panceta o beicon, queso pecorino o parmesano y pimienta negra. Aunque, si se quiere seguir la receta ortodoxa, habría que utilizar guanciale, un embutido italiano similar a la panceta o al beicon, hecho con una de las grasas más valorada del cerdo, la de la mejilla o papada, y condimentada con pimienta negra.
Prueba esta crujiente pizza que incluye un sobre de salsa carbonara para que lo dosifiques a tu gusto.
Es la pizza por excelencia en Estados Unidos, caracterizada por su salami picante, el pepperoni, además de los clásicos ingredientes (tomate y mozzarella). Atención: si en Italia se te antoja una pizza pepperoni, pide una Diavola, porque en italiano peperoni (con una sola “p”) significa pimientos. El término fue acuñado por los inmigrantes italianos en el país americano.
¿Sabías que la masa americana es más gruesa y flexible y, a veces, lleva los bordes rellenos de queso?
Quien se jacte de haber probado todos los tipos de pizza disponibles, seguramente incluya en su listado algunas un poco menos habituales, como la calzone y la pizza blanca:
Se trata de una pizza doblada por la mitad y con aspecto de gran empanadilla: esa sería su definición más sencilla. Dicen que surgió —probablemente en Nápoles— para poder comer la pizza con las manos sin que se cayeran los ingredientes. Aunque hay distintas variedades en Italia, la más conocida en España es la calzone con salsa de tomate, quesos —ricotta, parmesano y mozzarella— y jamón de york. Y lo que le da un sabor característico, además del punto ácido de la ricotta: hojitas frescas de albahaca.
Aunque parezca mentira, hay pizzas que no llevan salsa de tomate: son las pizzas “blancas”. En su lugar, utilizan simplemente aceite de oliva y una buena base de queso. Además, su masa suele ser fina y más bien crocante. Las hay con distintos ingredientes, aunque el mozzarella nunca falta: desde gorgonzola a espinacas, pollo o champiñones. Y si se incluye tomate, solo será en rodajas y fresco.